A veces hay chistes fabulosos que no logran el efecto deseado, pasa lo mismo con la comida, algunas bebidas e incluso con el amor.
Dos moscas adolescentes salen de la escuela y una le dice a la otra: “Te invito a mi caca”
Ese chiste podría compararse con una IPA artesanal en un bar cool, una pizza congelada de buena marca o el amor a un gato. No está mal pero no llega a romper la resistencia que todos tenemos a la carcajada. Digo todos y el amargado soy yo, el resto se ríe con mayor liviandad, vale decir que a mi primer esbozo literario lo llamé “miseriedad” un juego de palabras entre seriedad y miseria y, si bien ha pasado un tiempo de eso, la mueca de mi boca sigue tendiendo hacia abajo.
A veces escribo maravillas que no logran el efecto deseado, aunque no sé si son maravillosas o quiero que lo sean.
Se encuentran dos fantasmas que hacía tiempo no se veían y uno pregunta: ¿Qué es de la muerte de tu abuelo?
Este chascarrillo tiene el record de no hacer reír a nadie nunca, sin embargo al igual que alguno de mis cuentos a mí me gusta mucho. Muchos lo equiparan con una Bieckert tibia, una milanesa de berenjena o el romance de Curro “el palmo”. Entonces es posible que mi sentido del gusto sea la causa de mi fracaso literario.
Yo soy un perro lobo, mamá loba y papá perro; yo un tiburón ballena mamá ballena y papá tiburón; yo un oso hormiguero…¡Dejate de joder!
Ojo, este, bien contado da para algunas risas especialmente en un año complicado como el actual donde lo social se ha condensado y el público se ha convertido en familiar directo que ya conoce casi todo lo que tengo para decir. Al principio se generaron reencuentros digitales con el pasado, pero poco a poco quizás nos dimos cuenta que la soledad sigue siendo solitaria a pesar de tanta charla virtual.
¡Doctor! Me parece que soy asmático, ¿Será grave?, No, es esdrújula.
Este me gusta, aunque da para espetarlo en alguna reunión docente o literaria, casi no lo usé este año y ojo que va como tira de asado, daikiri y “Antes del amanecer”
Ante la falta de público, calculo que he perdido un 35% de mi capacidad humorística, lo cual es complicado porque desde mi proceso de deconstrucción me vi obligado a deshacerme de un 30% de mis chistes, o sea que si alguna vez retomo la vida social me van a encontrar nada más que 35% divertido.
Dicen que los ocupas está yendo a Hawai porque allá nadie te des-aloha.
Y sí, me retiro con este choripán de cancha de fútbol, diet Sprite y “Seducción de dos lunas”
Otro día me pongo filosófico, hoy es demasiado lunes de lluvia y frío.
Queselevacer